Ayer, terminó otra época, hoy empieza una nueva ilusión. ¿Cuántos planes se van a poner en marcha? ¿Qué proyectos van a salir del baúl de los recuerdos? Ser fiel a mis ideas, me lleva a confiar en los míos, ayudaré a que la vida sea más fácil a todos, crearé puestos de trabajo y conseguiré hacer un mundo mejor. La hora de la verdad ha llegado, nadie puede quitarme la sensación de triunfo que tengo desde ayer. La euforia además de ser contagiosa, es una sensación que naciendo entre la garganta y el ombligo sube hasta apoderarse del cerebro consiguiendo que la adrenalina que mi cuerpo almacena, se libere dándome la sensación de poder.
Tiembla Europa, España renace de sus cenizas y una nueva época viene a relanzar a un país que sabe mucho de luchar y de vencer. Adiós señora Merkel, sólo le queda jubilarse y darse un paseo por la selva negra, para ver si allí, se le aclaran las ideas, tal vez se pueda llevar a su lacayo Nicolás Sarcozy. Tal vez entre los dos inventen una nueva forma de gobernar sojuzgando a los pueblos de su alrededor, pero todo eso no les va a servir de nada, el próximo día dos de Diciembre, se celebrará en todo el mundo y aunque ustedes no quieran, el día de la abolición de la esclavitud, que en el año mil ochocientos cuatro proclamó la corona Inglesa.
Pido perdón por la licencia que al principio de este escrito me he permitido, pero es que la ocasión la pintan calva. Yo voy a seguir llorando por España y por el resto de la Europa de segunda división. Si alguna vez llego a ver en esta vida o en cualquiera de las otras (que no creo que viviré) el resurgir de estos países, sólo aprovechados en los intereses espureos de esos supuestos salva patrias, que a base de pepinos, primas de rescate y la madre que los perdió, lo único que pretenden y han pretendido desde que nos acunaban con sus donativos por no criar vacas, por arrancar las viñas, por plantar yute y algunas que otras gilipolleces del mismo tamaño, lo que siempre han pretendido y pretenden, es usarnos de papel higiénico de la Europa de primera velocidad ¡! ANDA YA!! Y si los que llegan ahora (sea en hora buena) piensan que por ser de derechas (o por lo que sea) que tengan claro que por hambre, por necesidad y porque no seguiremos aguantando más a políticos analfabetos, se lo vamos a decir en voz muy alta, pero si vienen dispuestos a obligarnos a trabajar, predicando con el ejemplo y a no querer la última gota de leche de la vaca, bien venidos sean, estos o cualquier otro.
Balfrido Erades
lunes, 21 de noviembre de 2011
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